La Republica es una fuente inagotable de inspiración para quienes estamos preocupados por la situación social y política de nuestras sociedades.
Como me gustaría entrar en la multitud de aportaciones que esta maravillosa obra tiene para nuestro mundo, creo que lo más acertado sería comenzar justo allí por dónde se la denosta, esa excusa, tan socorrida de lo políticamente incorrecto: La crítica de Platón a la Democracia.
Cuando Platón critica a la Democracia lo hace desde el planteamiento clásico, ciñendo el termino Democracia a lo que su significado etimológico designa: el sistema de las Mayorías. Nada hay en Platón “contra el Pueblo” antes bien, todos su sistema político está claramente organizado a procurar la felicidad del Pueblo.
Cuando nuestra Modernidad Occidental confeccionó un sistema de mayorías, lo hizo desde los platemiento Roussonianos y marxistas que hacían coincidir la mayoria de personas con intereses comunes. Me explico, cuando la Burguesia liberal reclama el voto para las mayorías lo hace desde la circunstancia histórica de que la mayoria de la población pertenecía de hecho a la Burguesía: ese fue el origen de la Revolución Liberal Inglesa.
Más claro es a este respecto Kart Marx, que defiende el sufragio Universal únicamente porque las circunstancias históricas de su tiempo hacían que la mayoria de la población perteneciera al proletariado urbano oprimido y bajo la miseria.
En ninguno de los dos, ni en Rousseau ni en Marx- a sus obras me remito, las conozco bien- hay una defensa a ultranza del régimen de mayorías, sino simplemente la reclamación del sufragio Universal para conseguir un vuelco revolucionario, por otro lado, justísimo.
Desde finales de los 60, numerosos teóricos de la izquierda como Noam Chomsky y Pietro Barcellona, se han preguntado por la legitimidad de mayorías como las que llevaron a regímenes racistas al poder en Alemania, es indudable que eran mayoria…..absoluta.
Hace tan sólo una década, el democratísimo bloque occidental tuvo que no reconocer la victoria del fanatísimo FRENTE ISLÁMICO DE SALVACIÓN NACIONAL , que trunfó por más del 90 % de los votos en Argelia, entre otras cuestiones planteaba bombardear “AL- ANdalus”
En Afganistán, los Talibanes cosecharon la mayoria absoluta, con más de un 80% de los votos, y nadie duda de su fanatismo y de su visión contra los derechos humanos. Hubo que sacarlos del poder…
Y qué decir de occidente, cuando para cosechar votos se hacen proclamas prometiendo ser “comprensivos” con la evasión fiscal………
O cuando se declaran guerras ilegales para subir en las encuestas electorales,
O cuando se aceleran condenas a muerte para subir en los sondeos…
La obsesión por las mayorías está llevando a una frivolización absoluta de temas gravísimos que hace que un desastre ecológico sean “hilillos de petroleo bajo control” en función del quien esté en el poder….
Que nadie se equivoque, no soy un transnochado nostálgico , en
Absoluto, más bien provengo de la militancia activa por los derechos humanos y la distribución de la riqueza, lo curioso es que precisamente los que veiamos en las mayorías la posibilidad de alcanzar justicia, los hechos sean tan rematadamente tozudos, que cada vez le tengamos más miedo a “lo que diga la mayoría”.
Lo siento, nunca aceptaré a Hitler, ni a Bush, ni a señores `por el estilo, por mucha mayoria que tengan…
SANI.